martes, 17 de enero de 2012

Tu mundo.

  Conocí a un chico que vino del sol, él era el único chico que sabría toda la verdad sobre mí...
  Su cariño es como la luz ultravioleta, la siento quemarme pero, me gusta sentirla. No me importa dañar mis ojos, te mirare hasta quedar ciega... Puedes odiarme, no me importa, porque sé, que eres la cura.
  Estoy abrumada e indiferente... bebé, ¿Qué esperabas?, estoy mucho más allá del límite, tan deshonrada y me avergüenza también mostrar mi rostro...
  Ella viene a buscarme justo ahora, sé que lo que quiero nunca lo tendré. Estoy en el borde de la colina, con sus mentiras en mis manos...
  Conocí a un chico que me dejó tan asombrada, ¿Acaso ella alguna vez supo la gravedad de los daños?
  Y ella sabe, que me estoy ahogando, ella sabe que me ahogo con todo esto...
  En mis labios sucios hay secretos muertos y en el medio de las sabanas las promesas que me sostuvieron en sus ojos...
 Estoy sangrienta y totalmente sometida, no sé qué hacer con mis manos ahora...
 Pero, me entrego a esto, lo estoy dando todo, soy capas de derribar paredes para lograr estar junto a él...
 Me estoy volviendo adicta, no puedo liberarme, no lo resistiría, así que no me hagas moverme fuera del resplandor, su cariño es como la luz ultravioleta...
 Estoy sentada en la cima del mundo, ahora tengo todo lo que siempre necesité, sé que esta vez acerté...
  Y me pierdo completamente, mirando tus ojos bebe.  Y ya no me importa estar en el borde de la colina, con sus mentiras en mis manos, porque voy a tirarlas... Ya no tengo que sostenerlas nunca más...
   Bebé, pusiste tu propio mundo en mis manos, tu gran mundo está en mis manos.
  Estaré por ahí muriendo por ti bebe y tengo tu vida en mis manos, tu mundo entero está en mis manos... Y sabes que estoy dispuesta a hundirme en el, me hundiré en el...

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